martes, 11 de agosto de 2009

Solo un poquito mas... porfi...

Jo, ya he vuelto de la playuqui, con algo de colorcito, he de añadir, aunque haya personas que se empeñen en que no estoy morena, pero, sí, lo estoy, en serio, lo que pasa es que soy muy blanca y me cuesta coger color. Cuando me pongo al sol tengo la impresión de que el gran astro se pone gafas para poder aguantar la reflexión que producen sus rayos en mi piel.
Como siempre que veraneo me he ido con unas cuantas amigas y hemos alquilado un apartamento, el cual, limpio limpio, lo que se dice limpio, pues... no estaba, pero como tampoco pasamos mucho tiempo dentro intentamos no acumular más mierda de la que tiene de serie y punto. Se podía decir que los momentos de más asquito se daban cuando había que dormir y ducharse.
Las camas no tenían sábanas y las almohadas daban un poco de... cómo decirlo... vamos que sabes que ahí ha dormido gente que no conoces y ha sudado lo que no está escrito, porque, buag, buag, ¡ves el surquillo marronáceo que se ha quedado tatuado! buaagggg.
Visto el panorama nos fuimos ha comprar a un gran establecimiento de origen tirafrutas, la comida para la semana, sábanas, toallas, y almohadas. Al principio en vez de almohada pensé en comprarme un cojín, que luego en casa lo colocas en el sofá o encima de la cama y queda tan bien, pero me dejé llevar por la solidaridad y... bueno y por el precio también, que me salía más barato comprarme una almohada que el cojín, pues bien, error, porque está muy bien dar una parte para la ayudar a la lucha del cancer de mama, pero yo me pasé todas las vacaciones diciendo: mamá. Ella fue la que me dijo: "llevate tu almohada viscolástica". ¿ Por qué me dijo eso? porque soy tan tan apasionada de las vacaciones que el día que nos íbamos me levanté con compañía, una estupenda contractura cervical, ¡yupi!. Aunque las contracturas dan vidilla, hacen que te sientas realizada como bailarín, jamás pensé que se me diera tan bien hacer el robot, porque ya que tienes el giro limitado del cuello, pues unes el resto del cuerpo. Lo único malo, que te quita espontaneidad, porque si quieres mirar de forma disimulada, o giras todo el cuerpo o le pides a quien quieras ver que se te ponga delante.
Bueno, a ver, que me quedé en que estábamos en "tetirolafrutaynomelavo", todo muy bien puesto, la bebida, la comida, la ropa, todo muy bien, menos una cosa, no es necesario recrear el invierno, que es cuestión de meses que llegue, de verdad.
Ya con la compra hecha nos dirigimos a las cajas donde una señorita muy maja nos atendió, pero dejándonos claro que no le apetecía un pedo trabajar porque estaba mala, y tenía fiebre y si le daba la gana todo esto nos lo decía en valenciano, lengua que como todo el mundo sabe se imparte desde maternales en todos los colegios de Madrid.
Hay que agradecerle a la cajera que no nos contagiara la gripe A y que hablara bajo, porque así la mayor parte de lo que nos dijo lo interpreté como: madre mía, cuando vuelva a Madrid voy a que me hagan una audiometría, estoy más sorda que el bibliotecario de Fray Perico.






PD: Quiero más vacaciones, solo un poquito más y otro día os cuento más cosas de las vacaciones, donde hay borracheras, insultos y ¿tú tienes la edad?

2 comentarios:

Leeeti dijo...

Seguro que si estas morena mujer!!Lo que pasa esque aun no te he visto, tras tu vuelta.
Lo de tu tienes la edad, fijo que fue a ti. Lo he presenciado contigo en varias ocasiones!!

Srta. Aristas dijo...

Yo morena me veo, sobre todo en la oscuridad, y lo de la edad... no diré nada hasta el post, jojojo.